lunes, 30 de junio de 2008

Peleones



“No, tío”, oigo al perturbpacificador hablar por teléfono con un amigo, ignorante de que estoy en el cuarto de al lado, haciendo como que leo, “Ya sabes que no se puede hablar con la piba del Topo. Es la peor. Hasta yo, que estaba con ella en clase antes de que salieran juntos mantengo las distancias. Es la que empieza siempre. Sólo con decirle: ‘ese me ha mirado’ hay lío. Al Topo se le va la olla cuando bebe, pero es buen tío. ¡No te ralles con él, que tiene una pandilla de matones!“
“Pásamelo, ‘Gandhi’” escucho cómo el perturbpeleón le quita el teléfono su gemelo, “A ver, maricón, ¿dónde es la movida el viernes? Vale, tío. Ahí nos vemos.” Parapetada tras mi libro... dudo entre intervenir; proporcionarles luchacos o un spray de autodefensa ; castigarles sine die y mantenerles a salvo en casa ooooo.... esperar como una etóloga de lo doméstico a que llegue el macho alfa, o sea: mi Santo, para cargar sobre su lomo plateado el asunto de la testosterona belicosa. Al final les llamo. Si la pereza es la madre de todos los vicios, y como madre hay que respetarla (Les Luthiers, dixit), todo perturb varón tiene su talón de Aquiles. Nosotras, antes mujeres que madres, sabemos que una de las formas de conquistar a un hombre es por el estómago. Así que activo el plan “T&N” (tortitas con nata), estratagema extrema y que nunca falla, para hacerles hablar.

Cuando ya llevan tres cada uno, saco la conversación. “¿Qué va a pasar el viernes?”, le pregunto al peleón abortando todo reflejo de desconfianza al ponerle una porción exagerada de syrup de fresa. “Hay tribus ¿sabes?: pandillas. Están los indis, los sarperos, los bacalas, los poqueros, los macarras, los nazis, los pijos... Tenemos zonas. Pero en algunos bares nos mezclamos. Si tienes amigos, no pasa nada.”
“Pasa”, dice el pacífico antes de meterse una tortita entera en la boca, “que siempre hay uno que empieza. Busca, le dan. Llama a sus amigos y durante algunos findes hay pequeñas peleas hasta que, en una calle a la que pueda venir la policía (por si se pone peligroso), se queda para la gran movida. Han retado a Nico, ¿Vamos a dejar tirado a un amigo?”.

“Al escritor Bernad Shaw cierta señora le quiso invitar con una sencilla fórmula: “La señora tal, su admiradora, estará en su casa mañana, entre las cinco y las ocho”. Y Shaw le contestó con otra sencilla fórmula: “Yo también en la la mía”, contesto justo cuando llega Mi Santo mostrándonos unas entradas para la Expo. “¡Lo siento por Nico!”, dicen al unísono los perturbs. Eficacia : Macho Alfa, 1; madre 0.

(Publicado en el MAGAZINE de EL MUNDO. 30/06/2008)

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Mano de Santo, It, nunca mejor dicho. Pero qué dificilito se está poniendo tó, por dios. hasta que salgan los viernes por la noche...

Beso.

T dijo...

Como la veo muy patriota y muy futbolera, le sugiero que ponga también esta foto:

http://www.elpais.com/fotografia/infanta/Elena/pasea/bandera/elpdiadep/20080701elpepidep_3/Ies/

¡No se pierda el detalle de los pendientes!

T dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Ginebra dijo...

Ains!!! Que yo tengo unos anillitos como esos!!!